El precio de terminación es la tarifa que pagan las empresas de telecomunicaciones por el uso de las redes que no le pertenecen, es decir, que son propiedad de las otras compañías del mercado.
Hay dos precios de terminación: uno para las llamadas que terminan en números fijos y otro para las que terminan en celulares.
Dado que Antel es la empresa con mayor participación en el mercado de telefonía móvil y cuenta con el monopolio de telefonía fija, la baja abrupta de tarifas que resolvió Ursec disminuirá la recaudación de la estatal uruguaya por
este concepto en 60 %. La pérdida asciende a 6,5 millones de dólares anuales.
En contraposición, el beneficio económico que las dos multinacionales, Claro y Movistar, obtendrán es equivalente en monto.
